Cristina podría recibirlo diez minutos, palmearle la espalda y despacharlo

VARGAS LLOSA VIENE DE REGALO / UN PREMIO NOBEL CON BANCA/ MACRI, AVILA Y BENEGAS LINCH DE ANFITRIONES

Por Alberto Ferrari

   La polémica sobre la presencia del Premio Nóbel de Literatura Mario Vargas Llosa en  próxima Feria Internacional del  Libro de Buenos Aires ha soslayado que la invitación no surgió de la Fundación El Libro, sino de la Fundación Libertad, un centro de estudios de derecha patrocinado por decenas de empresas, que ya trajo al escritor peruano al país en marzo de 2008, durante el conflicto con las patronales agropecuarias.

   La presencia de Vargas Llosa en Argentina ya estaba prevista desde hace tiempo y “gentilmente” la Fundación Libertad ofreció al flamante Premio Nóbel para que inaugurara la Feria del Libro de este año, ya que coincidía con su presencia en un seminario organizado en Buenos Aires sobre el “populismo” en América Latina.

     La Fundación El Libro debió superar la resistencia interna de varios de sus miembros, especialmente editores independientes, preocupados por el efecto político que provocaría la presencia de Vargas Llosa, por sus comentarios lapidarios sobre el gobierno “populista” de los Kirchner.

    Los que  votaron  a favor de la presencia de Vargas Llosa en la Feria del Libro, argumentaron que se trataba del último Premio Nóbel que le daría relevancia internacional a la edición de este año y que la Fundación era, en definitiva, una organización “modesta”, que carecía de presupuesto como para traer a personajes de envergadura mundial hasta Buenos Aires.

    Finalmente, hubo un acuerdo en el seno de la Fundación: Vargas Llosa sería el “invitado de honor” pero a condición de que no incursionara en la política. Una delgada línea que obviamente el escritor puede trasponer cuando suba al escenario el jueves 21 de abril.

    “No fue fácil llegar a un acuerdo porque había algunos editores como Aurelio Navajas (Colihue) que se oponían y porque es cierto que al margen de las promesas,  un tipo inteligente como Vargas Llosa puede introducir un sutil comentario político en medio de un discurso académico”, explicó a Puedecolaborar un consejero de la Fundación El Libro.

    El consejero, que admite “simpatías” con el gobierno de Cristina Fernández, explicó que oponerse a Vargas Llosa hubiese sido un precedente contraproducente, pues el veto podría extenderse en el futuro a otros escritores de izquierda, progresistas o de pensamiento latinoamericano.

   “Vamos a suponer que José Saramago estuviese vivo y lo quisiéramos traer el año que viene. Si rechazábamos a Vargas  Llosa,  podían saltar luego los de Planeta diciendo que no querían a Saramago porque era un viejo comunista”, explicó el consejero.

   Lo cierto es que Vargas Llosa apareció de “regalo” a instancias de la Fundación Libertad, que organiza el Encuentro regional: El desafío populista para la libertad de América Latina) del 17 al 20 de abril en Buenos Aires, con una jornada de campo en San Antonio de Areco.

  Además de Vargas Llosa, han sido invitados el cubano exiliado anticastrista Carlos Alberto Montaner, el ex presidente español José María Aznar y entre los argentinos se anuncia en el programa al Jefe de Gobierno Mauricio Macri y a los economistas ultraliberales Alberto Benegas Lynch y Jorge Avila.  

  La Fundación Libertad ya festejó sus veinte años en Rosario entre el 27 y 28 de marzo de 2008, durante la disputa por la resolución 125, con la presencia de Vargas Llosa, Azar, Luis Alberto Lacalle (Uruguay), el derechista boliviano Jorge Quiroga, el actual presidente de Chile, Sebastián Piñera, y el infaltable Montaner, o sea el elenco estable de la organización que entre sus socios menciona a los bancos Galicia, Provincia de Córdoba, Francés BBVA, Hipotecario, Patagonia, Municipal de Rosario (¿ no responde al gobierno socialista de la ciudad?), HSBC y Citibank, además de multinacionales como Cargill, y las argentinas Acindar, Celulosa y la Bolsa de Comercio de Rosario.

   Para el consejero el debate sobre la presencia de Vargas Llosa ha sido “positivo” pero cuestiona a sus “amigos” que “mandaron primero una carta a Clarín” contra la presencia del escritor peruano  y “recién después pidieron una reunión urgente de la Cámara Argentina de Libro.

Una  última recomendación del consejero para descolocar a Vargas Llosa: “la presidenta Cristina Fernández debería recibirlo en la Casa Rosada, felicitarlo por el Premio Nobel y despacharlos en diez minutos.  Así, no podrá recurrir a sus habituales argumentos contra el gobierno argentino”, completó.