Movida en el Indoaméricano: ¿contra la presidenta?

Por Silvia Valerga 

ENCENDIERON LA MECHA Y SE DESATÓ LA GUERRA DE POBRES CONTRA POBRES

   No caben dudas. La ocupación del Parque Indoamericano fue obra de Mauricio Macri para arruinar los festejos del Día de los Derechos Humanos y el 3º aniversario de Cristina Fernández de Kirchner  en el Gobierno.

    Desde que asumió Macri, el parque de la zona sur donde viven los pobres de la ciudad, es un pastizal con todo el aspecto de terrenos fiscales abandonados. Primero les  prometieron los títulos de propiedad, entonces la gente se metió y ocupó para asegurarse el beneficio.

    Después que la Policía Federal desalojó  el predio, dejó a cargo de la Policía Metropolitana el cuidado del parque, pero estos efectivos permanecieron inmóviles cuando volvieron a ocuparlo. Solo miraban.

    Las balas  mortíferas provenían de patotas integradas por sindicalistas y  barrabravas, que los vecinos de Soldati no los conocen y en una lucha de pobres contra pobres,  vivaban a Macri y a la Metropolitana y gritaban consignas contra la Presidenta y la Federal.

    Algunos con sus caras tapadas por pañuelos, armados con calibres 22 y piedras, atacaron ocasionando 4 muertes y un número importante de heridos, al mismo tiempo que  impidieron  el acceso de las ambulancias del SAME. El último muerto fue rematado en presencia de los médicos. 

    El momento más violento se produjo, “justamente”, cuando la  Presidenta hablaba en cadena y a su término, los canales TN, América y 26 destacaron  el hecho con  notorio regocijo.

   “No soy tan ingenua para pensar que las cosas suceden por casualidad", dijo la mandataria y  tuvo una rápida respuesta al crear el Ministerio de Seguridad, separando en dos el Ministerio  Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, el más flojo de su gestión, a la luz de los resultados.  El Jefe de Gobierno había responsabilizado a “todo este avance de la inmigración ilegal” y aseguró que no pensaba dialogar con los ocupantes del Parque Indoamericano.

   Queda para el debate si la política de construcción de viviendas, que a pesar de que está presupuestada, el gobierno no está ejecutando, debería destinarse por igual a los sectores de menores recursos, sean nacionales o extranjeros, es decir, que las familiar argentinas tengan el mismo derecho que las  de inmigrantes, para acceder a una vivienda económica provista por el Estado.

   Cabe recordar que Juan Domingo Perón construyó viviendas en todo el país y no discriminó a los inmigrantes, pero dado que la actual corriente migratoria proviene de países vecinos y pobres, esa política podría generar una avalancha de demandas imposibles de satisfacer para una economía en crecimiento, pero que trabaja con esfuerzo para reducir la desocupación y la falta de viviendas.