Según Clarín “se quedan con nuestros ahorros” y para La Nación “el gobierno se financia con fondos de la ANSES”
Por Silvia Valerga El 15 de septiembre de 2008 cayó el Lehman Brothers en EEUU y marcó el comienzo de la crisis de los principales bancos estadounidenses y europeos. En ese tiempo existían las AFJP que invertían en acciones de bancos, empresas transnacionales y títulos de países extranjeros; de modo que de existir las AFJP hoy tendríamos papeles de altísimo riesgo del City Bank o del Brothers, como también títulos griegos y portugueses, o acciones de Exxon, la empresa que quebró en medio de un escándalo.
Pero el gobierno argentino actuó rápidamente y el 21 de octubre del 2008 la presidenta firmó el proyecto de ley que eliminó el sistema previsional de capitalización y reestableció el alcance universal del régimen de reparto, al tiempo que reclamó el apoyo de los partidos de oposición para aprobar la iniciativa.
Ahora los fondos del ANSES –compuestos el 60 % de aportes de trabajadores y empresarios y el 40% de aportes tributarios-, aumentaron más de un 70% respecto de los que manejaban las AFJP.
En virtud de que volvimos a un sistema de reparto, 2,4 millones de personas, a las que se les había negado la posibilidad de jubilarse, hoy perciben una jubilación mínima. La Asignación Universal por Hijo que promueve la escolarización y la vacunación, llegó a 3,6 millones de chicos. El 12 % de los fondos se invierten en proyectos productivos: obras públicas de infraestructura vial, energética, hídrica y de construcción de viviendas, a una tasa del 10%, costo financiero del 13% y a 20 años de plazo.
La administración de los fondos de los jubilados le cuesta a los aportantes 4,5 millones de pesos, mientras que cuando estaba en vigencia el sistema privado, por las comisiones, ascendía a 354 millones de pesos, casi 100 veces más.
La contracomunicación
El diario Clarín combatió esa medida con títulos de tapa: “Se quedan con nuestros ahorros”. Pero no decía que la empresa tenía todos sus empleados afiliados a Máxima, una AFJP ligada al grupo mediático, mientras La Nación –por una cuestión ideológica- sostenía en su portada la absurda defensa del sistema previsional inventado en la década de los 90 y ahora titula “el gobierno se financia con el dinero de la ANSES”.
Por su parte, el gobierno continúa con la deficiente política de comunicación que no retruca - salvo en el reducto de 6,7 y 8- y no informa con campañas de difusión en todos los medios, posiblemente por el criterio de que “mejor es hacer que decir”, aunque la comunicación debería ser la clave de la relación entre gobierno y pueblo.
Genial!!! Esto es lo que hay que comunicar!
ResponderEliminarSaludos.